«Inglaterra tuvo solo el 35% (23,1 mm) de su precipitación promedio para el mes», dijo el servicio meteorológico nacional del Reino Unido, Met Office, en un comunicado el lunes.
El sur y el este del país se vieron particularmente afectados por la falta de lluvias. El sur de Inglaterra registró su julio más seco desde 1836, con solo el 17% de la precipitación promedio, según la oficina meteorológica.
Al igual que el resto de Europa, en julio se produjo una ola de calor sin precedentes en las Islas Británicas. El Reino Unido vio temperaturas superiores a los 40 grados Celsius (104 Fahrenheit) por primera vez, con una temperatura récord de 40,3 grados Celsius establecida el 19 de julio en Coningsby, Lincolnshire.
En Francia, hubo solo 7,8 mm de lluvia en julio, dijo el lunes a la radio FranceInfo Christophe Béchu, ministro de Transición Ecológica del país.
“Tenemos un déficit del 88% respecto de lo que hubiera sido necesario”, agregó Béchu.
La ola de calor de julio provocó incendios forestales en el oeste y el sur del país, y se espera que una nueva ola de calor golpee a Francia esta semana.
Se pronostica que el suroeste alcanzará potencialmente los 40 grados centígrados el miércoles, según Météo France, el servicio meteorológico del país.
Los incendios forestales han estado apareciendo en el sur de Francia, y el más grande en el departamento de Gard destruyó más de 350 hectáreas (más de 860 acres) de bosques el domingo por la noche, según el departamento de bomberos local.
Casi la mitad del territorio de Europa, incluido el Reino Unido, está «en riesgo» de sequía, advirtieron investigadores del Centro Conjunto de Investigación de la Comisión Europea el 18 de julio.
Una «porción asombrosa» del 44% del territorio de la Unión Europea y el Reino Unido está sujeta a una advertencia de sequía, con un 9% en alerta de sequía, dijeron los investigadores.