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BERLÍN (Reuters) – Intel Corp se ha alejado de su objetivo original de abrir una fábrica de chips en la ciudad de Magdeburg, en el este de Alemania, en la primera mitad de 2023, informó el periódico regional Volksstimme, diciendo que el gigante de los semiconductores quería más subsidios públicos.
La planta es fundamental para los planes de Alemania y la Unión Europea para fortalecer la resiliencia del continente haciendo más fabricación localmente después de que la pandemia de COVID-19 y la invasión rusa de Ucrania destacaran los riesgos de las largas cadenas de suministro que se extienden por todo el mundo.
Pero el periódico dijo que el aumento de los precios de la energía y las materias primas había alterado los cálculos originales de la empresa estadounidense. Mientras que Intel había presupuestado originalmente costos de 17.000 millones de euros (18.000 millones de dólares), los precios ahora estaban más cerca de los 20.000 millones de euros, dijo el periódico.
«Los desafíos geopolíticos han aumentado y la demanda de semiconductores ha caído», dijo el vocero de Intel, Benjamin Barteder, citado por el diario. «Esto significa que aún no podemos dar una fecha definitiva para el inicio de la construcción».
La compañía agregó que estaba discutiendo con el gobierno cómo se podría cerrar una «brecha» de financiamiento, dijo el periódico.
«La brecha surgió en esta situación actual. Estamos trabajando con socios en el gobierno para impulsar el proyecto», dijo Intel citado por el diario.
Intel no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
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