“El centro de gravedad se está moviendo hacia el norte. Estamos redirigiendo fuerzas, recursos y energía hacia el norte. Creo que estamos al borde de una nueva fase de esta guerra y necesitamos adaptarnos”, dijo.
Según el ministro, los objetivos de Israel en la guerra en el norte son «claros y simples»: «devolver sanos y salvos a sus hogares a los habitantes de las ciudades del norte». “No nos hemos olvidado de los rehenes ni de nuestras tareas en el sur. Este es nuestro deber y al mismo tiempo lo cumplimos”, añadió Gallant.
Anteriormente, Ynet y Haaretz informaron que en medio del “ataque de búsqueda”, las FDI decidieron transferir una de sus unidades, la 98.ª División, de la Franja de Gaza a la frontera con el Líbano. Como señala Ynet, había tres divisiones de las FDI en la Franja de Gaza: la 98, la 162 y la 252. El primero está formado por brigadas de comando y paracaidistas. La decisión de trasladarla se tomó “en previsión de una posible escalada”.
El día anterior, los buscapersonas pertenecientes a miembros de Hezbollah comenzaron a explotar en masa en el Líbano. Como resultado, más de 4 mil personas resultaron heridas y otras 12 murieron. Según Al-Hadath, unos 500 miembros de Hezbollah perdieron la vista debido a las explosiones. Hezbollah dijo que Israel enfrentaría un «duro ajuste de cuentas» por el ataque del buscapersonas.
Hoy también comenzaron a explotar en el Líbano walkie-talkies y otros dispositivos que contienen componentes electrónicos. El turco Yeni Şafak informa que en el Líbano, además de walkie-talkies, también volaron scooters y automóviles con la última tecnología electrónica. La agencia Tasnim publicó un vídeo de una scooter en llamas y también informó de explosiones de portátiles, radios y ordenadores en diferentes puntos del Líbano. Según Al-Hadath, los dispositivos inalámbricos explotaron en coches y scooters.
Desde octubre del año pasado, cuando estalló la guerra entre Israel y HamásHezbolá lleva a cabo periódicamente “ataques de solidaridad” en zonas del norte de Israel, y las FDI disparan contra las posiciones del grupo. Sin embargo, hasta hace poco, Beirut sólo se había convertido una vez en blanco de ataques israelíes: el 30 de julio, uno de los altos comandantes de Hezbollah, Fuad Shukr, fue asesinado en sus suburbios. A finales de agosto, Israel y el grupo libanés intercambiaron los golpes más importantes desde el verano de 2006, pero evitaron una guerra a gran escala.
Haaretz informó ayer que la inteligencia israelí había registrado “señales inusuales” de preparativos militares de Hezbolá en el sur del Líbano. El periódico no especificó cuáles exactamente. Según la publicación, las FDI intentan simultáneamente demostrar moderación para negociar un acuerdo de seguridad con el grupo libanés, que se lleva a cabo a través de intermediarios, pero también exploran la posibilidad de lanzar un ataque preventivo para impedir que Hezbollah gane una “ventaja militar o propagandística”.