Un jurado de EE. UU. encontró el viernes que Tesla Inc y el director ejecutivo, Elon Musk, no son responsables en un caso de fraude de valores por un tuit que decía que había obtenido fondos para privatizar la compañía de automóviles eléctricos.
Los demandantes reclamaron miles de millones en daños y la decisión también se consideró importante para el propio Musk, quien luchó agresivamente contra los cargos de culpabilidad y defendió ampliamente su capacidad para twittear.