TOKIO: La inflación subyacente en la capital de Japón se aceleró en diciembre a medida que se ampliaron las presiones sobre los precios, según mostraron los datos del viernes, manteniendo vivas las expectativas del mercado de un aumento de las tasas de interés a corto plazo.
Los datos estarán entre los factores que el Banco de Japón (BOJ) examinará en su próxima reunión de política monetaria del 23 y 24 de enero, cuando algunos analistas esperan que aumente las tasas de interés a corto plazo.
El índice básico de precios al consumidor (IPC) de Tokio, que excluye los costos volátiles de los alimentos frescos, aumentó un 2,4 por ciento en diciembre respecto al año anterior, en comparación con un pronóstico medio del mercado de un aumento del 2,5 por ciento. Esto siguió a un aumento interanual del 2,2 por ciento en noviembre.
Otro índice que excluye los costos de los alimentos frescos y del combustible, que el Banco de Japón sigue de cerca como un mejor indicador de la inflación impulsada por la demanda, subió un 1,8 por ciento en diciembre respecto al año anterior, después de aumentar un 1,9 por ciento en noviembre, mostraron los datos. .
Los datos de inflación de Tokio, considerados un indicador líder de las tendencias a nivel nacional, son seguidos de cerca por los responsables de las políticas en busca de pistas sobre cuánto progreso está logrando Japón para cumplir de manera duradera la meta de inflación del 2 por ciento del BOJ, un prerrequisito para más aumentos de tasas.
El BOJ puso fin a las tasas de interés negativas en marzo y elevó su tasa de política de corto plazo al 0,25 por ciento en julio, considerando que Japón estaba logrando avances constantes en el cumplimiento de su meta de inflación.
El gobernador Kazuo Ueda ha manifestado su disposición a aumentar nuevamente las tasas de interés si la economía y los precios se mueven en línea con las proyecciones de la junta.
Todos los encuestados en una encuesta de Reuters a principios de este mes esperan que el BOJ suba las tasas de interés al 0,5 por ciento para marzo del próximo año. Su decisión de mantener las tasas estables este mes ha aumentado la atención del mercado sobre si se produciría un aumento en su próxima reunión del 23 y 24 de enero, o en una revisión posterior de las tasas el 18 y 19 de marzo.