PyE
TOKIO: La inflación subyacente al consumo en la capital de Japón se aceleró en noviembre y se mantuvo por encima del objetivo del 2 por ciento del banco central en una señal de una creciente presión sobre los precios, según mostraron los datos del viernes, manteniendo vivas las expectativas del mercado de un aumento de las tasas de interés a corto plazo.
El yen subió frente al dólar después de los datos, mientras los actores del mercado se preparaban para la posibilidad de que el Banco de Japón (BOJ) aumente las tasas de interés a corto plazo desde el actual 0,25 por ciento en su próxima reunión de política monetaria en diciembre.
El índice básico de precios al consumidor (IPC) de Tokio, que excluye los costos volátiles de los alimentos frescos, aumentó un 2,2 por ciento en noviembre respecto al año anterior, superando una previsión media del mercado de un aumento del 2,1 por ciento y acelerándose desde un aumento del 1,8 por ciento en octubre.
Otro índice que excluye los costos de los alimentos frescos y del combustible, que el BOJ sigue de cerca como un mejor indicador de la inflación impulsada por la demanda, subió un 1,9 por ciento en noviembre respecto al año anterior, después de un aumento del 1,8 por ciento en octubre.
Los datos de Tokio, que se considera un indicador líder de las tendencias de precios a nivel nacional, mostraron que los hogares se vieron afectados por el aumento del alquiler, las facturas de servicios públicos y los costos de los alimentos.
Los precios del sector servicios subieron un 0,9 por ciento en noviembre respecto al año anterior después de un aumento del 0,8 por ciento en octubre, subrayando la opinión del BOJ de que las perspectivas de aumentos salariales sostenidos están impulsando a las empresas a cobrar más por los servicios.
El dólar cayó un 0,3 por ciento a 151,125 yenes tras la publicación de los datos. Poco más de la mitad de los economistas encuestados por Reuters esperan que el BOJ vuelva a subir las tasas en su reunión del 18 y 19 de diciembre.
Datos separados mostraron que la producción fabril de Japón aumentó un 3,0 por ciento en octubre respecto al mes anterior, aunque los fabricantes encuestados por el gobierno esperan que la producción caiga en los próximos meses.
El Banco de Japón puso fin a las tasas de interés negativas en marzo y elevó su tasa de política de corto plazo al 0,25 por ciento en julio, considerando que Japón estaba haciendo progresos constantes hacia el logro duradero de su objetivo de inflación del 2 por ciento.
El gobernador Kazuo Ueda ha dicho que el Banco de Japón seguirá aumentando las tasas si la inflación sigue en camino de alcanzar establemente el 2 por ciento, como proyecta.
