El secretario general de la ONU, António Guterres, no tiene autoridad para obligar a los delegados de los países miembros a proporcionar pruebas de que han sido vacunados contra el coronavirus. Así lo anunció durante una sesión informativa del representante oficial de Guterres Stephane Dujarrick.
Anteriormente, las autoridades de Nueva York, donde se encuentra la sede de la ONU, dijeron que todos los que asistirán a las reuniones en el Salón de la Asamblea General de la ONU la próxima semana deben confirmar que han sido vacunados contra el COVID-19.
“El Secretario General no tiene autoridad para obligar a los delegados a hacer nada”, dijo Dujarrick.
Señaló que el personal de la sede de la ONU que interactúa con periodistas o diplomáticos debe vacunarse. Según el secretario de prensa de Guterres, en total, 519 personas enfermaron de infección por coronavirus entre los trabajadores de la ONU en Nueva York, que hasta donde sabe la organización, ninguna contagió a otras durante su trabajo.
“En cuanto a los delegados, trabajaremos con el presidente de la Asamblea General”, dijo el portavoz. Agregó que las autoridades de Nueva York han propuesto instalar una carpa de vacunación frente al edificio de la ONU.
El Representante Permanente de Rusia ante la ONU, Vasily Nebenzya, criticó la demanda de las autoridades de Nueva York. En su opinión, no solo es discriminatorio, sino que también contradice la Carta de la ONU y el acuerdo sobre la sede de la ONU celebrado entre la ONU y los Estados Unidos en 1947.
El representante de Rusia explicó que el territorio de la sede está controlado por la propia organización, y en este territorio no puede operar una sola ley que contradiga las reglas de la ONU.
Al mismo tiempo, la ONU no exigió a los delegados que presentaran certificados de vacunación. Nebenzya propuso convocar una reunión urgente de la Asamblea General el 16 de septiembre y discutir la situación.
La posición de las autoridades de la ciudad está relacionada con el hecho de que la próxima semana (21-27 de septiembre) en Nueva York será una semana de alto nivel de la Asamblea General de la ONU, durante la cual se celebrarán reuniones en persona por primera vez desde la pandemia. A ellos asistirán líderes de países, jefes de gobierno y ministros. El presidente de la 76ª sesión de la asamblea, Abdullah Shahid, apoyó la demanda de vacunación y la calificó como «un paso importante en nuestro regreso a una Asamblea General plenamente funcional».
Según los últimos datos, se han identificado más de 2 millones de infectados en Nueva York desde el inicio de la pandemia.