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La policía albanesa regresó el jueves a la oposición iraní, el complejo de la Organización Muyahidines del Pueblo de Irán (MEK) cerca de Durres, poco más de una semana después de que una redada a gran escala para incautar computadoras y servidores resultó en enfrentamientos con residentes y múltiples heridos.
El MEK es una organización militar de oposición iraní que aboga por el derrocamiento del régimen actual en Teherán. Después de ser expulsada de Irán, la organización se trasladó a Camp Ashraf, Irak, cerca de la frontera iraní en 1985 y se puso del lado de Irak durante la Guerra Irán-Irak.
En 1992, llevó a cabo ataques contra embajadas iraníes en 13 países y fue designada organización terrorista por EE. UU., Canadá, la UE, el Reino Unido y Japón por su uso de tácticas terroristas. Este estatus se eliminó durante la década de 2000 y sus miembros se trasladaron a Albania y Francia.
El martes de la semana pasada, la Policía Estatal y fuerzas especiales ingresaron al predio para realizar un allanamiento, lo que derivó en un grave enfrentamiento ya que los vecinos se negaron a entregar equipos informáticos.
La policía fue vista fuera del recinto el jueves, deteniendo y registrando cualquier vehículo que entrara o saliera de las instalaciones. Fuentes policiales de los medios locales dijeron que se están realizando controles para garantizar que no se traigan más equipos informáticos al campamento para continuar con el trabajo que se sospecha que realizan.
Varios exmiembros del campo han concedido entrevistas a los medios de comunicación albaneses para contar su experiencia en el campo. Ibrahimi dijo que formó parte de MEK durante 17 años y no se le permitió reunirse con sus propios familiares durante ese tiempo.
“Quiero decir que mi nombre es Ibrahim Muradi, estuve 17 años en el MEK. Cuando los familiares venían a MEK a recibirnos, les tirábamos piedras. No elegí ir al MEK porque era un hombre con hijos, pero me engañaron”, dijo.
Según el tribunal especial contra la corrupción y el crimen organizado del país, se sospecha que miembros del MEK llevaron a cabo ataques cibernéticos contra Irán, incluidas instituciones públicas y gubernamentales, mientras se encontraban en territorio albanés.
SPAK registró procesos penales el 18 de mayo de 2023 por los delitos de “provocación de guerra”, “intercepción ilegal de datos informáticos”, “interferencia en datos informáticos”, “uso indebido de equipos” y grupo delictivo estructurado.
Se está investigando a varios miembros del MEK en relación con la negativa a obedecer las órdenes policiales y la destrucción de bienes, entre otros.
Además, también se investiga la muerte de un residente. La policía dice que murió de un ataque al corazón, mientras que los miembros del MEK dicen que murió debido a la acción policial.
Los documentos judiciales también señalan que de los aproximadamente 3000 miembros del MEK que fueron llevados a Albania en 2018, unos 450 escaparon. Se cree que alrededor de 300 abandonaron el país ilegalmente, 100 cruzaron la frontera con documentos regulares y 50 permanecen.
En marzo de 2021, Facebook acusó a MEK de administrar una granja de trolls fuera de su base en Albania, cerrando más de 300 cuentas pertenecientes a miembros.
En un comunicado publicado en su sitio web, Facebook dijo que había investigado e interrumpido una “operación de larga duración desde Albania que tenía como objetivo principal a Irán”.
A lo largo de los años, se han hecho muchas preguntas sobre MEK, con The Guardian cuestionando si los miembros del grupo son terroristas, cultistas o campeones de la democracia iraní y el New York Times describiendo una visita allí como llena de «sesiones de propaganda».
Aquellos que han informado sobre MEK con una visión crítica plantearon posibles problemas legales o cuestionaron su presencia en Albania han denunciado amenazas y campañas de difamación, incluido el acoso en línea dirigido.
En 2019, Exit accedió al complejo para un foro e informó que el maquillaje y los dispositivos móviles fueron confiscados al ingresar, los miembros vestían uniformes estrictos y estaban segregados por sexo. En los días posteriores a la visita, el periodista fue hostigado vía telefónica y móvil por múltiples miembros de la organización.
(Alice Taylor | Exit.al)
