La presidenta de Georgia, Salome Zurabishvili, ha propuesto incluir la retirada de las tropas rusas de Osetia del Sur y Abjasia en un posible futuro acuerdo de paz con Ucrania. Ella dijo esto en una entrevista con Bloomberg.
“Rusia necesita saber dónde terminan sus fronteras”, dijo Zurabishvili. Según el jefe de Estado, este tema debe ser discutido.
Zurabishvili cree que si la comunidad mundial no exige la retirada de las tropas de Rusia, entonces «Occidente cometerá otro gran error».
Rusia en agosto de 2008 reconoció la independencia de Abjasia y Osetia del Sur. Esto fue precedido por un conflicto armado en Osetia del Sur. En la noche del 8 de agosto de 2008, Georgia envió tropas a la región y comenzó a bombardear Tskhinvali. En respuesta, Dmitry Medvedev, entonces presidente de Rusia, anunció el inicio de una operación «para imponer la paz». Rusia desplegó sus propias fuerzas en la zona de conflicto, el enfrentamiento duró cinco días. Como resultado, el ejército georgiano se vio obligado a abandonar la región, las unidades rusas entraron en Georgia y se detuvieron cerca de Tbilisi. El 12 de agosto, Medvedev anunció la finalización de la operación. Mikhail Saakashvili, quien entonces dirigía Georgia, llamó a los territorios de las repúblicas ocupadas por Rusia y anunció su retiro de la CEI.
Tras el inicio de la operación militar de Rusia en Ucrania, Georgia no se unió a las sanciones contra Rusia. El primer ministro de Georgia, Irakli Garibashvili, dijo que sumarse a las restricciones perjudicaría a los residentes del país. Aunque Zurabishvili dijo en febrero que Tbilisi «participa en todas las sanciones financieras internacionales», el primer ministro del país enfatizó que la parte georgiana no impondría restricciones a Moscú, siguiendo sus intereses nacionales.
El mes pasado, el encargado de negocios interino de Ucrania en Georgia, Andrei Kasyanov, escribió en un artículo para European Pravda que Kyiv había pedido a Tbilisi que devolviera los complejos Buk transferidos en 2008 y Javelins recibidos de Estados Unidos, pero este último se negó. Ministerio de Defensa Georgia respondió explicando que compró los sistemas Buk en 2007 por varios millones de dólares. Más tarde, la viceprimera ministra de Georgia, Teya Tsulukiani, dijo que el país no permitiría verse envuelto en un conflicto militar.
Rusia y Ucrania estuvieron negociando un acuerdo de paz desde finales de febrero de 2022 hasta mediados de mayo, pero luego se detuvieron. Moscú afirma que no se niega a negociar, pero Kyiv debe mostrar voluntad política y disposición para discutir las demandas expresadas por Rusia. Las autoridades ucranianas piden la restauración de la integridad territorial del país y la compensación por las pérdidas como condiciones para el diálogo.