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Los humanos no están solos en el uso de herramientas. Los chimpancés, por ejemplo, rompen nueces con piedras y usan palos para atrapar termitas sabrosas. Se sabe que los delfines emplean esponjas para proteger sus picos mientras buscan alimento. Y un pinzón de las Islas Galápagos usa espinas de cactus para sacar larvas de sus agujeros.
Las nutrias marinas también son miembros del club de manejo de herramientas del reino animal. Y un nuevo estudio ofrece una comprensión más completa del uso de herramientas (utilizar rocas y otros objetos para abrir presas duras) por parte de estos mamíferos marinos. Permite a las nutrias comer ciertas presas más grandes y reduce el daño en los dientes al reducir la necesidad de masticar caparazones duros, y las hembras usan herramientas más que los machos, tal vez para compensar su tamaño corporal más pequeño y su fuerza de mordida más débil, encontraron los investigadores.
Los investigadores observaron 196 nutrias marinas del sur a lo largo de la costa central de California: Big Sur, Monterey, San Luis Obispo, Piedras Blancas y Elkhorn Slough.
Cuando no aplastan a sus presas con los dientes, las nutrias flotan sobre sus espaldas cuando se alimentan y usan piedras, conchas y botellas desechadas como martillos o yunques para abrir presas de caparazón duro, y a veces también golpean a sus presas contra las superficies de muelles y barcos.
Entre las presas se encontraban erizos de mar, orejas de mar, cangrejos, mejillones, almejas, caracoles y gordos gusanos posaderos. Los caparazones de ciertas presas más grandes serían demasiado duros, sin herramientas, para romperlos y acceder a las partes blandas comestibles del interior. Por ejemplo, de lo contrario no estarían disponibles mejillones, almejas y caracoles.
«El uso de herramientas permite a los individuos mantener sus necesidades energéticas mediante el procesamiento de presas duras alternativas que normalmente son inaccesibles solo con morder, lo que sugiere que este comportamiento es una necesidad para la supervivencia de algunas nutrias en ambientes con recursos limitados», dijo el biólogo evolutivo Chris Law de de la Universidad de Texas y la Universidad de Washington, autor principal del estudio publicado el jueves en la revista Science.
La frecuencia del comportamiento de uso de herramientas varía: algunas nutrias lo hacen más del 90 por ciento del tiempo cuando se alimentan y otras rara vez o nunca, según la coautora del estudio Rita Mehta, bióloga funcional y comparada de la Universidad de California en Santa Cruz. .
El uso de herramientas fue particularmente importante para las nutrias hembras.
«Las hembras necesitan calorías. Son más pequeñas que los machos, y las hembras preñadas o lactantes tienen demandas calóricas elevadas. Se demostró que las hembras que utilizan herramientas consumen una mayor proporción de presas muy grandes para ayudarlas a satisfacer sus necesidades calóricas», dijo Mehta.
La nutria marina del sur, una subespecie también llamada nutria marina de California, puede alcanzar hasta 1,2 metros (4 pies) de largo. Los machos pesan hasta unas 70 libras (32 kg) y las hembras hasta unas 50 libras (23 kg).
Comer presas de caparazón duro, como lo hacen las nutrias, puede provocar roturas de dientes.
«Sin sus dientes, las nutrias no pueden comer y morirán. Las hembras muestran un daño ligeramente menor en sus dientes en general, probablemente debido a su mayor uso de herramientas», dijo Law.
Las nutrias marinas, el miembro más grande de la familia de las comadrejas, generalmente comen diariamente una cantidad equivalente a aproximadamente una cuarta parte de su peso corporal mientras merodean por los bosques de algas marinas y los lechos de pastos marinos. La población de nutrias marinas del sur a lo largo de la costa de California asciende a sólo unas 3.000.
Las nutrias eran oportunistas en cuanto a sus herramientas.
«Las nutrias son mamíferos inteligentes y muy fuertes. Las personas que viven a lo largo de la bahía comúnmente observan a las nutrias usando una variedad de materiales desechados por humanos como herramientas, desde botellas de vidrio hasta pedazos de plástico, por lo que las nutrias parecen flexibles en lo que pueden intentar utilizar para abrir presas», dijo Mehta.
