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Un grupo de 15 estados miembros de la UE acordó acoger a 40.000 afganos para su reasentamiento, dijo la comisionada Ylva Johansson el jueves (9 de diciembre) después de reunirse con los ministros del interior.
Alemania aceptará el grueso de los recién llegados, con 25.000, con Holanda aceptando 3.159, España y Francia 2.500, y otros países con cifras más bajas, según un documento visto por AFP.
“Y creo que este es un acto de solidaridad impresionante”, dijo Johansson, argumentando que permitir que más afganos migren de manera controlada ayudaría a prevenir las “llegadas irregulares”.
El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados había instado previamente al bloque a aceptar 42.500 afganos durante cinco años, pero algunos de los 27 países miembros se habían resistido.
Se estima que hay 85.000 afganos que han huido de su tierra natal a países más cercanos a la UE, y la toma de Kabul por los talibanes junto con una feroz sequía podría desencadenar nuevos flujos.
Durante las secuelas de la caótica retirada militar estadounidense y el regreso del régimen talibán, en agosto, 24 estados de la UE ya han acogido a 28.000 evacuados.
Pero el director de ACNUR, Filippo Grandi, advirtió que 85.000 afganos que viven en situaciones vulnerables fuera del bloque necesitan reasentamiento y ha instado a Europa a que se quede con la mitad.
Johannson había descrito previamente este objetivo como «factible», pero aún tenía que persuadir a los gobiernos de los estados miembros, y solo confirmó la cifra después de la reunión del jueves.
Los 40.000 afganos son parte de un paquete más grande de 60.000 reasentamientos y admisiones humanitarias prometidas por los estados miembros, según el documento visto por AFP.
En la dotación global más grande, Francia y Suecia hacen promesas mayores de 5.000 y 4.200 reasentamientos, pero estos no serán necesariamente afganos. Bélgica prometió plazas para 425 afganos y 1.250 más.
Los funcionarios de la UE no pudieron dar de inmediato una escala de tiempo para los recién llegados.
