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Praga y el Parlamento Europeo son socios en estos tiempos difíciles causados por la guerra, acordaron los principales legisladores de la UE y los líderes checos durante una reunión en la capital del país antes del período de seis meses de Chequia al frente del Consejo de la UE.
Los desafíos derivados de la agresión rusa en Ucrania aumentan las expectativas para la próxima presidencia checa de la UE, dijo el primer ministro Petr Fiala el jueves (16 de junio) después de su reunión en Praga con la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, y los líderes de los grupos políticos del Parlamento.
Les informó sobre las prioridades de la presidencia, presentadas oficialmente el miércoles (15 de junio). Praga asumirá la presidencia rotatoria del Consejo de la UE de manos de París el 1 de julio.
“Es crucial que nos digamos unos a otros, aún antes de que comience la presidencia, lo que cada uno de nosotros espera y cómo podemos ayudarnos unos a otros”, dijo Fiala, elogiando la ayuda continua de Metsola.
Metsola dijo que los próximos meses crearían el futuro de Europa a través de sus reacciones a la brutal agresión en Ucrania y también por los pasos que se tomen para enfrentar el impacto de la pandemia de COVID-19.
Fiala dijo que el debate con los líderes del Parlamento también se refirió a la ampliación de la UE, principalmente por parte de los estados de los Balcanes Occidentales, pero ambas partes también coincidieron en la necesidad de otorgar el estatus de candidata a la UE a Ucrania.
La discusión también abordó la migración, los objetivos de seguridad, la seguridad energética, la autosuficiencia y la política climática de la UE.
Sin embargo, la política energética y climática podrían ser áreas en las que las dos partes chocarán durante los próximos seis meses.
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Chequia ha elogiado las reglas de taxonomía de la Comisión Europea, que otorgan un estatus especial a la energía nuclear y al gas, fuentes muy importantes para Praga. Sin embargo, los pasos recientes tomados por los influyentes comités del Parlamento podrían desbaratar tales planes y reiniciar las negociaciones.
El otro tema potencialmente candente es la prohibición propuesta por la UE de las ventas de vehículos nuevos con motor de combustión interna (ICE) para 2035, impulsada por el Parlamento pero criticada por el gobierno checo.
Fiala prometió que Chequia presionaría para que se relajaran las reglas si la presidencia francesa no lograba obtenerlo.
