Debido a los ataques, las SDF se vieron obligadas a suspender la lucha contra el Estado Islámico (EI, reconocido como organización terrorista en Rusia y prohibido), y Estados Unidos dependió en gran medida de las fuerzas kurdas en la lucha contra los terroristas, señala el WSJ. Según ella, más de 900 tropas estadounidenses se encuentran en el noreste y este de Siria (esta es la zona kurda) para luchar contra ISIS y, según las fuentes, permanecerán allí para continuar la lucha.