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Por Elise Stefanik para RealClearPolitics
De las innumerables mentiras sobre Kamala Harris perpetuadas por los demócratas y sus leales taquígrafos en los principales medios de comunicación, una de las más atroces es que una presidencia de Kamala Harris brindará una oportunidad económica histórica para las mujeres trabajadoras.
Desafortunadamente para estos demócratas desesperados que intentan borrar los datos disponibles públicamente, los números cuentan exactamente lo contrario. Kamala Harris y Joe Biden cargaron contra las mujeres con el mayor recorte salarial, la mayor crisis inflacionaria, el mayor aumento de impuestos y la mayor crisis económica en lo que va del siglo, mientras que el presidente Trump proporcionó el mayor impulso económico a las mujeres estadounidenses que cualquier presidente moderno haya dado.
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El ingreso medio de las mujeres aumentó cada año durante la administración Trump, alcanzando el nivel más alto registrado en 2020. Las ganancias semanales promedio reales aumentaron un 8,2% con el presidente Trump, pero disminuyeron un 3,9% con Joe Biden y Kamala Harris.
La tasa de desempleo de las mujeres en general y de las mujeres negras en particular alcanzó un mínimo histórico durante el mandato del presidente Trump. En 2019, la brecha de participación laboral entre hombres y mujeres se redujo al nivel más estrecho de la historia. La economía del presidente Trump hizo historia con la mayor cantidad de mujeres en la fuerza laboral de la historia.
Esto no fue casualidad. Consciente de que las mujeres trabajadoras también están equilibrando sus familias, el presidente Trump presentó una agenda económica a favor de la familia que incluía duplicar el crédito fiscal por hijo de 1.000 a 2.000 dólares por niño y ampliar la elegibilidad. Casi 40 millones de familias recibieron un beneficio promedio de 2.200 dólares bajo su liderazgo, lo que totalizó créditos por aproximadamente 88.000 millones de dólares.
Luego creó el primer crédito fiscal por licencia familiar remunerada para empleados que ganan $72,000 o menos y promulgó la ley de 12 semanas de licencia parental remunerada para trabajadores federales. También firmó el mayor aumento de la historia en subsidios en bloque para el cuidado y desarrollo infantil, ampliando el acceso a servicios de cuidado infantil de calidad y asequibles para más de 800,000 familias de bajos ingresos.
El presidente Trump firmó una ley que permite a los nuevos padres retirar hasta $5,000 de sus cuentas de jubilación sin penalización cuando dan a luz o adoptan un hijo.
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La pregunta que se plantea con frecuencia sobre el equilibrio entre el trabajo y la vida familiar es: ¿pueden las mujeres tenerlo todo? Bajo el liderazgo del presidente Trump, la respuesta fue un rotundo sí.
Con Joe Biden y Kamala Harris, no tanto.
Las políticas económicas fallidas de Biden y Harris perjudican a todos los estadounidenses, pero las más afectadas son las mujeres. Las mujeres son las más afectadas por el voto decisivo de Kamala Harris a favor de la cómicamente llamada “Ley de Reducción de la Inflación” de Biden, que impulsó la inflación con un exceso de ridículo gasto climático. Las mujeres están trabajando más horas y retrasando la jubilación como resultado.
Hable con cualquier mujer en Estados Unidos y no habrá duda de que la inflación es un problema de mujeres. Desde que Kamala Harris asumió el cargo de vicepresidenta, los precios han aumentado un 19,4%, lo que hace que a las mujeres les resulte cada vez más difícil mantener a sus familias. Las mujeres son mayoría en las compras de alimentos, y las facturas de los mismos se han disparado, obligando a muchos estadounidenses a recortar gastos en productos básicos.
Una madre soltera de dos hijos en Nevada tuvo que vender su auto para poder comprar alimentos durante el gobierno de Biden. Una madre de dos hijos en Michigan tuvo que “pensar en poner el precio de la gasolina antes de comprarle ropa a mis hijos” debido al voto decisivo de Kamala Harris a favor de la radical agenda de energía verde de Biden.
Según el Comité Económico Conjunto del Congreso, las familias necesitan ahora 12.590 dólares adicionales al año solo para mantener el mismo nivel de vida que disfrutaban hace tres años, y el 67% de los padres afirman que la inflación ha afectado a su capacidad para pagar la educación, los útiles escolares y las actividades extracurriculares de sus hijos durante el último año escolar. El costo del cuidado infantil ha aumentado un 32% para la familia promedio desde 2019, y casi dos tercios gastan el 20% o más de sus ingresos anuales en el cuidado infantil.
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El precio medio de un paquete de pañales desechables ha aumentado un 32% desde 2019, y el 47% de las familias afirmaron tener dificultades para comprarlos. En 2022, la incompetencia de Joe Biden y Kamala Harris creó una escasez de fórmula infantil, lo que hizo que el precio se disparara a un máximo histórico. Unos 44 millones de personas vivían en hogares con inseguridad alimentaria en 2022, un aumento anual del 31% y el mayor aumento en un año desde 2008.
Las mujeres constituyen la mayoría de los votantes en Estados Unidos, por lo que no es de extrañar que la maquinaria propagandística de Harris esté trabajando a toda marcha para intentar engañarlas y hacerles creer que nunca han estado mejor. Pero por mucho que los demócratas puedan mentir, los números nunca lo hacen. Demuestran que el presidente Trump no solo se preocupa profundamente por las mujeres y todos los estadounidenses, sino que también sabe lo que se necesita para estimular la economía y crear oportunidades históricas en nuestro nombre.
Mientras tanto, Kamala Harris ve a las mujeres como un bloque electoral conveniente al que complacer, engañar y luego abandonar en favor de una agenda radicalmente liberal y económicamente venenosa.
A mis compañeras votantes: no se dejen engañar.
Sindicado con permiso de RealClearWire.
