A partir del próximo año, los precios de los alimentos en toda la Unión Europea pueden aumentar debido a las regulaciones ecológicas del bloque, advirtió la Cámara Checa de Alimentos.
Los productores de alimentos checos dicen que el sector se enfrenta a un «tsunami» de medidas ecológicas cuestionables que aumentarán los costos de producción y se sumarán a la ya significativa carga administrativa.
«Europa ya tiene alimentos más caros que el resto del mundo. Y ahora, debido a medidas sin sentido, tendremos que aumentar aún más los precios. Las preocupaciones sobre los efectos de la transformación verde son legítimas», afirmó Dana Večeřová, presidenta de la República Checa. Cámara de Alimentos, en un comunicado de prensa difundido este jueves.
En particular, la Sala se queja de la próxima obligación de informar sobre su huella de carbono o de la obligatoria reducción del desperdicio de alimentos. También le preocupa el impacto potencial de la Directiva de diligencia debida de la UE, que exige que las empresas gestionen activamente su impacto sobre los derechos humanos y el medio ambiente.
Otra cuestión es la reciente pospuesto La Ley de Deforestación de la UE, o la nueva regulación sobre residuos de envases, que la Cámara cree que será difícil de cumplir porque solo requiere materiales reutilizables para las transacciones entre empresas.
«Aún hoy a las empresas les resulta difícil satisfacer las nuevas exigencias y, desgraciadamente, la Comisión Europea sigue proponiendo medidas cada vez más controvertidas», se quejó el presidente de la Cámara Checa de Alimentación.
“En el futuro, Europa podría llegar a cumplir sus objetivos climáticos en su propio territorio. Sin embargo, esto no afectará a las emisiones globales de gases de efecto invernadero y se producirá a costa de una reducción de la producción y un aumento de las importaciones desde fuera de la UE”, añadió Večeřová.
Si bien los productores checos de alimentos afirman que no se oponen a «esfuerzos razonables» para mejorar la economía de la UE, consideran que las políticas verdes de la UE «se aplican mediante órdenes administrativas y prohibiciones» sin comprender los «impactos específicos en la viabilidad y la economía de las empresas alimentarias».
«Las empresas alimentarias quieren funcionar de forma responsable y sostenible. Instamos al gobierno a que garantice que todos los objetivos ecológicos que persigue sean realistas a nivel de la UE y de la República Checa. Nuestro sector no debe perder competitividad», subrayó Večeřová.
(Aneta Zachová | Euractiv.cz)