Anunció el método encontrado en una reunión dedicada a resolver problemas de personal, informa el servicio de prensa del jefe de estado.
Prometió que nadie le quitaría el fondo de salarios a la gerencia si despidieran a algunas personas, y el dinero liberado podría dividirse como mejor le parezca.
“En cuanto a los salarios, creo que conoce bien mis actitudes”, dijo Lukashenka. Al mismo tiempo, recordó que en los años soviéticos, dejar el comité distrital del partido o el comité ejecutivo distrital por los directores de la granja estatal o los presidentes de las granjas colectivas era «un honor increíble», por lo que «estaban en línea.» El presidente de Bielorrusia cree que ha llegado el momento de revivir esta práctica.
Al mismo tiempo, Lukashenko consideró posible hablar de aumentar el fondo de salarios solo si había algunos éxitos. En su opinión, tal enfoque sería útil no solo en el caso de los funcionarios, sino también con los maestros, médicos y militares.
Durante la misma reunión, el jefe de Estado llamó a los funcionarios a actuar sin trámites burocráticos y los amenazó con un hacha. “Pase lo que pase… Hasta que el presidente golpee a alguien en la cabeza con un hacha o le vuele la cabeza, no hay solución al problema”, explicó Lukashenka.