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México presenta una demanda contra los principales fabricantes de armas de EE. UU.
La demanda involucra a Smith & Wesson, Barrett, Beretta, Colt, Glock, Sturm, Ruger, acusados de prácticas comerciales que conducen al tráfico de armas hacia México.
México presentó el miércoles una importante demanda contra los fabricantes de armas de Estados Unidos por el daño masivo causado por “el tráfico ilegal de armas a los cárteles de la droga y otros criminales en México”.
El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha convertido en una prioridad detener el flujo de armas estadounidenses ilícitas a través de su frontera norte. México ha experimentado tasas récord de homicidios en los últimos años y está buscando una compensación por daños, que se estima en US $ 10 mil millones, dijeron funcionarios del gobierno en la presentación de la demanda en un Tribunal Federal de Distrito de Estados Unidos en Boston.
Las autoridades mexicanas dicen que la gran mayoría de las armas recuperadas en las escenas del crimen son de Estados Unidos, contrabandeadas al país por poderosos cárteles. La venta de armas en México está severamente restringida.
La demanda alega que las unidades especiales de Smith & Wesson, Barrett, Beretta, Colt, Glock, Sturm, Ruger, entre otros, son muy conscientes de que sus prácticas comerciales conducen a un intenso tráfico ilegal de armas hacia México.
La demanda también incluye a Interstate Arms, un mayorista de armas con sede en Boston que comercializa armas de fuego de la mayoría de los fabricantes mencionados en la demanda ante distribuidores de todo Estados Unidos.
Los abogados del caso dicen que dos acciones judiciales contra fabricantes de armas actualmente en tribunales estadounidenses en California, así como un acuerdo de US $ 33 millones con Remington y algunas de las familias de niños y maestros asesinados en el tiroteo de la escuela primaria Sandy Hook en Newtown. Connecticut en 2012, han abierto un camino para la demanda.
Se estima que la guerra contra los capos de la droga se ha cobrado la vida de unos 300.000 mexicanos en los últimos catorce años, mientras que otros 73.000 han desaparecido.
