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La población indígena canaca, que favorece en gran medida la independencia, pidió la no participación en el referéndum porque se encuentra en un período de duelo de 12 meses tras un aumento repentino de las infecciones por coronavirus en septiembre.
«Los caledonios han optado por seguir siendo franceses. Lo decidieron libremente», dijo el presidente francés, Emmanuel Macron, en un discurso televisado.
«No podemos ignorar que el electorado permaneció profundamente dividido a lo largo de los años», agregó. «Ahora está comenzando un período de transición».
El presidente del Congreso de Nueva Caledonia, Roch Wamytan, un líder independentista, dijo que lamentaba que el gobierno francés hubiera rechazado su llamado a posponer el tercer referéndum hasta septiembre de 2022 por respeto a las costumbres locales de duelo.
«Este referéndum, para nosotros, no es el tercer referéndum. Consideramos que solo hay dos referendos legítimos. 2018 y 2020. Este referéndum es el referéndum del Estado francés, no el nuestro», dijo en la radio Franceinfo.
Los analistas temen que un voto «no» enfurezca a los partidarios de la independencia y genere inestabilidad.
«¿El peor de los escenarios? Un voto» no «que prohíbe la independencia, pero cuya legitimidad es rechazada por los canacos a través de una abstención masiva motivada por la negativa de París a posponer la votación», François Heisbourg, analista del grupo de expertos IISS, dijo en Twitter.
Nueva Caledonia, uno de los cinco territorios insulares que abarcan el Indo-Pacífico en poder de Francia, es la pieza central del plan de Macron para aumentar su influencia en el Pacífico.
La votación del domingo es la tercera prescrita por un acuerdo alcanzado una década después de que comenzaran las conversaciones sobre el futuro de la isla en 1988, y que convocó a una serie de referendos de independencia.
Los enfrentamientos estallaron en la década de 1980 en el territorio rico en níquel, a 1.200 kilómetros (750 millas) al este de Australia y a 20.000 kilómetros (12.000 millas) de Francia, entre los partidarios de la independencia y los que querían seguir siendo franceses.
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