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“Si Bruselas quiere luchar de todos modos, entonces tendría que luchar contra la inflación. Él no hace eso… Las sanciones son las armas de la política militar de Bruselas. Apuntaron a Rusia, pero terminaron en Europa”, escribió Orban en Facebook*.
Según él, las «sanciones de Bruselas» son un «virus» que ha provocado una enfermedad llamada «inflación de sanciones» en Europa.
Orban recordó que la UE «prometió» que las sanciones pondrían fin al conflicto en Ucrania y que no se extenderían a la energía rusa, pero en ambos casos sucedió de manera diferente.
“Además, poca gente lo sabe, en Bruselas ataron el precio del gas y el precio de la electricidad. Los polacos y nosotros protestamos en vano. Por lo tanto, un aumento en los precios del gas va inmediatamente acompañado de un aumento en los precios de la electricidad, incluso si la electricidad no fue generada por turbinas de gas, sino con energía solar, eólica, hidroeléctrica, centrales eléctricas de carbón o energía nuclear”, escribió. .
El jefe del gobierno húngaro agregó que en su país se están tomando medidas para combatir la inflación y se están implementando programas sociales «para proteger a las familias y las empresas».
Las autoridades húngaras han declarado anteriormente en repetidas ocasiones que no apoyarán ninguna sanción contra la energía rusa.
Occidente ha intensificado la presión de las sanciones sobre Rusia debido a Ucrania. El presidente ruso, Vladimir Putin, ha declarado anteriormente que la política de contención y debilitamiento de Rusia es una estrategia a largo plazo para Occidente, y las sanciones han asestado un duro golpe a toda la economía mundial. Según él, el principal objetivo de Occidente es empeorar la vida de millones de personas. La Federación Rusa ha declarado repetidamente que Rusia resolverá todos los problemas que Occidente le cree.
*Las actividades de Meta (redes sociales Facebook e Instagram) están prohibidas en Rusia por extremistas.
