«Esta histeria, que se está agitando ahora en los medios anglosajones, en los medios ucranianos y es apoyada por los políticos ucranianos encabezados por el jefe de Estado, la consideramos absolutamente inaceptable», subrayó en una entrevista con la prensa.
Según un portavoz del Kremlin, las palabras sobre un ataque supuestamente planeado por Rusia son absolutamente infundadas.
«Las mismas declaraciones de que Rusia va a atacar a alguien, y los reproches contra Rusia en el sentido de que Rusia se está comportando de alguna manera de manera agresiva, son absolutamente infundadas e incorrectas en esencia», dijo Peskov.
También sugirió que tales acusaciones pueden estar relacionadas con el deseo de ocultar los preparativos para una solución militar a la situación en Donbass.
“Tenemos miedo, ya hemos dicho que esta escalada puede ser un intento de ocultar nuestros propios preparativos. [Украины] sobre la solución contundente del problema de Donbass. Eso sería una completa locura «, agregó un portavoz del Kremlin.
A principios de esta semana, varios medios de comunicación occidentales informaron sobre una supuesta «invasión» rusa. En particular, el 20 de noviembre, el canal de televisión CBS News, citando fuentes, aseguró que tal amenaza supuestamente estaba creciendo con la proximidad del clima frío.
El jefe del departamento de inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania, Kirill Budanov, también anunció planes similares. En respuesta a sus palabras, el politólogo ucraniano Mikhail Pogrebinsky dijo que se trataba de un juego político o falso. El experto consideró que la tarea de tal declaración es sintonizar en el estado de ánimo adecuado los socios ucranianos y europeos en la OTAN.
Peskov también dijo que con declaraciones sobre supuestos preparativos para un ataque contra Ucrania, Occidente está avivando artificialmente la histeria. Según él, la Alianza del Atlántico Norte debe detener las actividades de provocación cerca de las fronteras de la Federación de Rusia, así como dejar de «bombear a Ucrania con armas modernas».
Desde 2014, Kiev ha estado llevando a cabo una operación militar contra los residentes de Donbass, que se negaron a reconocer los resultados del golpe de estado y el nuevo gobierno en Ucrania. Al mismo tiempo, Kiev culpa a Moscú de la situación actual. Rusia ha declarado en repetidas ocasiones que no es parte en el conflicto interno de Ucrania.