Presidente de Perú juramenta tres nuevos ministros
El gobierno de la presidenta peruana Dina Boluarte se sometió a una reorganización del gabinete esta semana a medida que la crisis del país sigue empeorando con manifestaciones más violentas, seguidas de asesinatos y arrestos.
En un acto en Palacio de Gobierno anunciado con muy poca antelación, Boluarte juramentó a Vicente Romero Fernández, Luis Alfonso Adrianzen y Nancy Tolentino como ministros del Interior, del Trabajo y de la Mujer, respectivamente.
El primero en dejar el Gobierno había sido Eduardo García Birimisa (Laborista), quien presentó este jueves su carta de renuncia y exigió a Boluarte disculpas por los errores cometidos.
Romero Fernández toma el relevo de Víctor Rojas Herrera y deberá estar al frente de la Policía Nacional del Perú (PNP) en el escenario actual. Rojas Herrera asumió hace poco más de tres semanas en reemplazo de César Augusto Cervantes, quien apenas había durado diez días en el cargo. Romero Fernández es un general retirado del PNP que ya se desempeñó como ministro del Interior durante tres meses del expresidente Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018). También encabezó la PNP entre 2015 y 2017, cuando el actual primer ministro Alberto Otárola fue ministro de Defensa del expresidente Ollanta Humala (2011-2016).
Adrianzen, abogado de oficio, es el nuevo Ministro de Trabajo. Se había desempeñado como secretario general del despacho de Otárola y fue su asesor durante la etapa de Otálora como ministro de Defensa. Adrianzen también fue gerente general del Ministerio de la Producción del ministro Jorge Luis Prado en el gobierno del expresidente Pedro Castillo Terrones (2021-2022).
La ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, Nancy Tolentino, es una psicóloga que tuvo otros trabajos dentro del ministerio en 2012. Tolentino también había sido delegada nacional alterna ante la Comisión Interamericana de Mujeres de la Organización de los Estados Americanos (OEA).
En medio de estos nombramientos, Boluarte también pidió “perdón” por la situación actual de Perú pero dijo que no renunciaría, que es una de las principales demandas de los manifestantes. También lamentó las 49 muertes registradas hasta ahora desde que asumió el cargo tras el juicio político de Castillo el 7 de diciembre. “Así como pido perdón, como presidente pido de todo corazón que rechacemos la violencia”, dijo Boluarte.
También saludó las investigaciones adelantadas por el Ministerio Público, que incluyen un sumario en su contra y Otárola, por los presuntos delitos de “genocidio, homicidio agravado y lesiones graves”. Sin embargo, Boluarte insistió en que también había que investigar a los «infiltrados extranjeros» porque algunas «armas y municiones» habrían ingresado al país por regiones del sur. “Debo ser enfático en señalar que este tipo de municiones no son utilizadas por la Policía Nacional ni por nuestras Fuerzas Armadas”, subrayó Boluarte.
El presidente admitió que las personas tienen derecho a protestas pacíficas, pero no se puede abusar de este derecho bloqueando carreteras, atacando negocios y otras acciones irregulares.
“Esta gente que genera odio, que quemaron casas de congresistas, que han asesinado a un policía, eso no les ha bastado, también han matado animales, qué culpa tienen los caballos o perros que han tirado sin piedad ¿Desde los puentes y asesinados cruelmente?”, se preguntó Boluarte mientras temía que el país “volviera a los años de la violencia terrorista, donde se colgaban perros de los postes de luz”.
Boluarte también recordó que Perú recibió esta semana a un equipo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) “para observar la situación política y social” e insistió en que no tenía “nada que ocultar”.
El Ministerio Público de Perú informó el viernes que 329 personas habían sido detenidas en relación con las manifestaciones antigubernamentales que comenzaron el mes pasado. Los detenidos, entre ellos un menor, están siendo investigados por “delitos contra la administración pública, motines, violencia, resistencia a la autoridad y entorpecimiento del funcionamiento de los servicios públicos”.
El “Ministerio Público garantiza que las investigaciones se realicen con estricto respeto a las leyes vigentes en el país y la defensa de los Derechos Humanos con orden, firmeza y celeridad”, señalaron en un comunicado.
La Fiscalía ha abierto ocho investigaciones por muertes registradas durante diversas protestas desde el inicio de la crisis.