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Putin escuchó el informe del ministro de Defensa, Sergei Shoigu. Según el Kremlin, los lanzamientos del misil balístico intercontinental Yars desde Plesetsk y el misil balístico Sineva desde el mar de Barents se llevaron a cabo en el sitio de prueba de Kura en Kamchatka. También se utilizaron aviones de largo alcance Tu-95MS, que lanzaron misiles de crucero lanzados desde el aire.
“Las tareas previstas durante el entrenamiento de las fuerzas de disuasión estratégica se han completado en su totalidad, todos los misiles han alcanzado sus objetivos, lo que confirma las características especificadas”, dijo el Kremlin.
La última vez que se realizaron los ejercicios de las fuerzas de disuasión estratégica (incluyendo armas hipersónicas y nucleares) con lanzamientos de misiles balísticos fue el 19 de febrero. Putin los vio junto con el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko. El 27 de febrero, el presidente de Rusia ordenó Ministerio de Defensa transferir las fuerzas de disuasión rusas a un modo especial de servicio de combate. Esto se hizo en respuesta a «agresivas declaraciones de altos funcionarios de los países OTAN«.
En ambas ocasiones, la Federación Rusa notificó a los Estados Unidos con anticipación los planes para realizar ejercicios. Ayer, 25 de octubre, a las Pentágono dijo que monitorearía las maniobras. En septiembre, Vladimir Putin habló sobre el derecho de Rusia a usar armas nucleares si su integridad territorial se ve amenazada. La Unión Europea amenazó con que un ataque nuclear contra Ucrania “provocaría una respuesta”, cuyo poder “sería grande desde el punto de vista militar”.
