Lima, Perú – Las autoridades de las regiones del norte de Perú que han sido azotadas por lluvias torrenciales han anunciado que se unirán a una huelga indefinida contra el gobierno nacional de Perú, citando que la administración de la presidenta Dina Boluarte no ha brindado apoyo a las comunidades afectadas.
Los líderes de las regiones de Tumbes y Piura hicieron los reclamos contra el gobierno, y el 11 de abril, Segismundo Cruces, Gobernador Regional de Tumbes, confirmó que su región se sumará al paro indefinido que los líderes de Piura organizaron unos días antes.
“Ya hemos tomado la decisión. Estamos hablando de organizarnos en esta lucha. Todos sabemos que el Gobierno Central no manda dinero y pone trabas”, el dijo Radio Exitosa.
“Estamos enfrentando las inundaciones solos. A la fecha no contamos con presupuesto para enfrentar esta emergencia”, agregó el gobernador regional.
Además, informó que la decisión no la tomó él, sino los alcaldes de su región ante el pedido de la población que día a día demanda ayuda.
El gobernador de Piura, Luis Neyra, le dijo a Canal N que el gobierno nacional no ha proporcionado fondos para la remoción de escombros y la reconstrucción después de que los ríos se desbordaron y dañaron severamente la región.
“Estoy de acuerdo con la molestia de los alcaldes, porque hasta ahora no han transferido una sola moneda al gobierno regional”, dijo.
Ha aumentado la desesperación de autoridades y ciudadanos en el norte de Perú cerca de la frontera con Ecuador. Miles de personas se vieron afectadas por el ciclón Yaku, que azotó la región del 4 al 20 de marzo, y ahora sienten los efectos de “El Niño Costero”, un fenómeno meteorológico que provoca un calentamiento anormal de las aguas del Océano Pacífico y el aumento en precipitaciones, algo que ha provocado inundaciones y deslizamientos de tierra.
En Piura y Tumbes, las casas, las calles y las avenidas están inundadas, y los lugareños piden ayuda a las autoridades para fumigar, ya que las moscas y los mosquitos proliferan.
La Defensora del Pueblo de Perú, Eliana Revollar, envió un informe al Ministerio de Salud informando que Piura tiene 5.362 personas sin hogar, 63.153 damnificados y 65 centros de salud dañados por las lluvias torrenciales.
También informó que Tumbes tiene 42 personas sin hogar, 2,601 damnificados y 13 centros de salud que sufrieron daños por inundaciones.
El Ministerio de Salud informó que a la fecha hay un incremento nacional de 202% en casos de leptospirosis en comparación con marzo de 2022. Esta enfermedad bacteriana se presenta principalmente después de fuertes lluvias.
A este problema se suman las 36.103 personas contagiadas por dengue en el país, la mayoría ubicadas en Piura.
El papel del gobierno
Para hacer frente a los desastres naturales, el gobierno peruano declaró un estado de emergencia de 60 días el 26 de marzo en las regiones norteñas de Lambayeque, Piura y Tumbes.
Según la agencia estatal de noticias Andina, esta decisión permitirá “la implementación de medidas y acciones de emergencia, inmediatas y necesarias, de respuesta y rehabilitación”.
El lunes, el gobierno nacional envió un barco a Piura con más de 500 toneladas de ayuda humanitaria y maquinaria para las regiones de Tumbes, Piura y Lambayeque.
“La ayuda humanitaria es parte de la respuesta del Estado, que va acompañada de la transferencia de recursos a los gobiernos regionales y locales de las zonas afectadas. Así podrán atender la emergencia”, dijo Boluarte antes de zarpar el barco.
Sin embargo, el Gobernador Cruces dicho que las autoridades de su región “no tienen conocimiento” de la ayuda humanitaria enviada y que ninguna autoridad del gobierno nacional se ha comunicado con él para coordinar.
Cruces adelantó que solo saben “que el barco partió” y que probablemente esté “encallado hoy en el muelle de Paita”.