“En cuanto al suministro de armas desde la Federación Rusa, por el momento es prácticamente imposible. Rescindimos algunos contratos y pospusimos otros con la esperanza de que la situación en las relaciones internacionales a nivel mundial se normalice y permita la implementación de los acuerdos”, dijo Mojsilović, señalando que Serbia está tratando de encontrar una salida a la situación actual.