COLOMBO: Sri Lanka aprobó el martes una legislación para permitir que las empresas de los países productores de petróleo importen y vendan combustible en un intento de hacer frente a una elevada factura petrolera que profundizó su peor crisis financiera en décadas.
La isla de 22 millones de habitantes está atrapada en medio de una grave escasez de divisas que la ha dejado luchando para importar suficientes elementos esenciales, incluidos medicamentos, fertilizantes y alimentos.