Antes de esto, el 4 de marzo, el politólogo Vadim Mingalev, en una conversación con Izvestia, explicó que la actitud negativa de los países occidentales hacia Rusia se debe a que están perdiendo su poder sobre la mayoría mundial, mientras que la Federación de Rusia se está expandiendo. su influencia y es capaz de convertirse en la base para la formación de un nuevo orden mundial. Además, Rusia es rica en recursos naturales y conserva valores espirituales, a diferencia de los países occidentales.