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Las dificultades económicas de Alemania y Francia podrían impactar negativamente a Italia, dijo el miércoles el ministro de Asuntos Exteriores y viceprimer ministro italiano, Antonio Tajani, subrayando la necesidad de impulsar la industria italiana.
Hablando en la Conferencia Nacional de Exportaciones en Milán, Tajani dijo: «No podemos alegrarnos de las dificultades de estos dos países», refiriéndose a las «extraordinarias relaciones económicas» de Italia con ellos.
«Si las cosas van mal allí, tampoco irán bien en Italia», añadió, señalando el inevitable efecto indirecto en Italia si ambas economías continúan su espiral descendente.
Tajani destacó la importancia de medidas para «fortalecer el sistema industrial» en Italia para mitigar estos riesgos.
Añadió que este enfoque no significa intervención gubernamental sino más bien fomentar un entorno en el que las empresas italianas puedan prosperar. Normas claras e incentivos para la innovación son pasos esenciales en esta dirección.
Las relaciones entre Italia, Alemania y Francia están profundamente entrelazadas, lo que refleja la interdependencia económica de las tres economías más grandes de la Unión Europea y los únicos países de la UE en el G7.
Juntos, forman un eje comercial fundamental dentro del bloque, cuyo comercio abarca sectores clave como las industrias automotriz y electrónica.
En cuanto al cambiante panorama político de Alemania, Tajani expresó su confianza en que la extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD) “nunca gobernará el país”.
“Estoy convencido de que el CDU-CSU tendrá éxito y veremos si forman una alianza con los Verdes o con los socialdemócratas. Lo que importa es volver a tener un partido fuerte”, afirmó.
Tajani también reiteró su apoyo al CDU-CSU, describiéndolo como parte de su propia familia política, el Partido Popular Europeo (PPE), y deseándole éxito en el futuro panorama político de Alemania.
(Alessia Peretti | Euractiv.it)
