En respuesta al reciente ataque terrorista en Solingen, el gobierno alemán está ampliando la prohibición de cuchillos en lugares públicos, incrementando los poderes policiales y planeando acelerar la deportación de solicitantes de asilo criminales y los casos de Dublín.
El mayor país de la UE se ha visto sacudido por un brutal ataque con cuchillo reivindicado por el Estado Islámico (EI), que ha dejado tres muertos y varios heridos. En respuesta, el Gobierno de coalición progresista ha anunciado medidas más duras y mayores poderes policiales.
«Cualquier persona en Alemania que ataque o amenace a otras personas con un cuchillo debe ser deportada, esto también debe aplicarse a los jóvenes», dijo el ministro de Justicia Marco Buschmann (FDP, Renew) el jueves (29 de agosto) en Berlín.
La ministra del Interior, Nancy Faeser (SPD, S&D), estuvo de acuerdo y destacó que “los cuchillos no tienen cabida en los festivales” y añadió que el gobierno quería “restringir aún más el uso de cuchillos en espacios públicos”.
Las nuevas medidas incluyen la prohibición de las navajas automáticas, facilitar la prohibición de portar armas a personas y facultar a los estados federales para crear zonas libres de armas, dijo Faeser, explicando el compromiso alcanzado por el gobierno.
Además, la policía podrá realizar “búsquedas aleatorias incluso sin sospecha previa”, dijo a los periodistas.
Berlín también creará dos grupos de trabajo: uno para investigar por qué el atacante de Solingen, que previamente había solicitado asilo en Bulgaria, no fue devuelto con éxito al país según las normas de Dublín después de que la policía no pudo localizarlo en su residencia.
Los refugiados que otros países de la UE están dispuestos a recibir de regreso verán recortada su ayuda, dijo el ministro del Interior, una norma que se convertirá en ley europea a partir de 2027 tras el acuerdo del Pacto de Asilo y Migración.
El segundo grupo se encargará de la “prevención del islamismo” para combatir la radicalización en línea.
Esto se complementará con una vigilancia adicional de los espacios digitales, incluida la comparación biométrica de datos públicos y el uso de inteligencia artificial, dijo Faeser.
Mientras tanto, los pedidos del líder de la oposición conservadora Friedrich Merz (CDU, PPE) de detener de inmediato la concesión de asilo a los refugiados sirios y afganos tras el ataque fueron rechazados.
En lugar de ello, el gobierno alemán quiere recortar el apoyo a cualquier solicitante que regrese a su país sin un motivo válido, como el funeral de un familiar.
Buschmann también quiere facilitar la denegación de asilo a cualquiera que cometa un delito de odio motivado por el “Islam, la yihad o el extremismo”.
[Edited by Kjeld Neubert/Daniel Eck]