Vicepresidente boliviano cede a la presión, acepta vacunar COVID-19
El vicepresidente de Bolivia, David Choquehuanca, finalmente acordó vacunarse contra el COVID-19 a pesar de ratificar que tomó el jab en forma voluntaria en Bolivia y que ya superó la enfermedad.
?? He adquirido inmunidad natural, pero como tenemos un decreto ahora, soy respetuoso con las reglas, y todos los bolivianos tenemos que cumplir con las reglas, me voy a vacunar en los próximos días, pero tengo inmunidad , ?? Choquehuanca dijo en una entrevista televisiva.
Desde el 1 de enero, se requiere una tarjeta de vacunación o una prueba de PCR negativa para COVID-19 para ingresar a edificios públicos y otros espacios interiores en un movimiento para frenar la propagación del virus.
El presidente Luis Arce y otros funcionarios fueron vacunados en actos públicos para alentar a la población, pero a recibir inmunización, pero Choquehuanca se había negado a, lo que provocó todo tipo de reacciones de los oponentes políticos, pero también de su propio partido gobernante Movimiento al Socialismo (MAS).
Choquehuanca, de ascendencia indígena aymara, explicó que había contraído COVID-19 en dos ocasiones y que se había recuperado dos veces al recurrir a la medicina naturopática. “He pasado el coronavirus la primera vez y lo he superado con la medicina ancestral. Luego me golpeó de nuevo y lo superé con medicina natural, ?? dijo en una entrevista radial.
«Hay dos formas de adquirir inmunidad: natural y artificialmente (vacunas), y yo he adquirido inmunidad natural». él dijo. Choquehuanca también explicó que había consumido “cúrcuma, jengibre, cebolla, ajo, miel”. en mezclas para beber por la mañana, así como miel con limón. También admitió haber masticado hojas de coca, una práctica ancestral en Bolivia, principalmente entre los campesinos aymaras y quechuas.
Se dice que Bolivia está atravesando su cuarta ola de coronavirus. El miércoles pasado se reportaron 6.149 infecciones en un día. El país ha registrado alrededor de 591.770 casos y 19.650 muertes de una población de 11,5 millones. La vacunación ha sido resistida en todo el país entre los pueblos indígenas que preferían las infusiones naturales.
Sin embargo, el ministro de Salud, Jeyson Auza, insistió en que, dado que la tarjeta de vacunación será necesaria en la mayoría de los aspectos de la vida cotidiana a partir de los 5 años, es mejor que las personas se vacunen. “Si quiero ejercer mi derecho a no vacunarme, también debo cumplir con mi deber de garantizar que no soy portador del coronavirus o una nueva variante que pueda afectar el derecho de la comunidad”. argumentó el ministro.
Auza también dijo que no se habían detectado casos de la variante Omicron, pero reconoció que tenía conocimiento de que podría llegar a su país en cualquier momento, ya que ya «entró en América Latina».