BEIJING: El presidente chino, Xi Jinping, ha pedido una campaña «total» para construir infraestructura, según los medios estatales, lo que marca el último intento de los líderes para impulsar el crecimiento en la economía golpeada por COVID.
A pesar de luchar para vencer el peor brote del país en dos años, el liderazgo está pisando fuerte con una estricta política de cero covid que involucra bloqueos en las ciudades más grandes y pruebas masivas.
Pero las medidas han enredado las cadenas de suministro y golpeado la moral empresarial, enviando ondas de choque a través de la economía y los mercados globales.
«La infraestructura es un apoyo importante para el desarrollo económico y social», dijo Xi en una reunión de alto nivel el martes, según la agencia oficial de noticias Xinhua.
La «infraestructura de China sigue siendo incompatible con la demanda de desarrollo y seguridad nacional», dijo el Comité Central de Asuntos Financieros y Económicos.
La reunión identificó varios sectores, como el transporte y la energía, donde se necesitaba un impulso de infraestructura, incluida la construcción de puertos y aeropuertos.
Los cierres recientes han obstruido las cadenas de suministro y las redes de transporte, incluso en los dinamos económicos de Shanghái y Shenzhen, así como en la canasta de granos del noreste de Jilin.
Los comentarios de Xi son los últimos de una serie de declaraciones y pasos destinados a impulsar la confianza en la economía y tranquilizar a los mercados, pero los comerciantes no se conmovieron ante la última promesa radical, mientras que un gran impulso al gasto también podría reavivar las preocupaciones sobre la deuda.