ex ministro instó al gobierno serbio decidir sobre el tema de las sanciones contra Rusia, señalando que Belgrado ya está pagando un «alto precio» por no apoyar las medidas restrictivas occidentales.
“Alguna posición extraña: Estados Unidos presiona a Serbia y el ministro serbio llama a oponerse a Rusia. ¿Quizás sería mejor que el ministro serbio hablara enérgicamente contra la presión sobre su país? Rusia, a diferencia de Estados Unidos, siempre ha respetado a Serbia y su gente. Y el punto no está solo en la verdad histórica, sino en un hecho evidente: con la imposición de sanciones contra Rusia, la presión de los Estados sobre Serbia no terminará, sino que solo se intensificará”, escribió en su canal de Telegram.
El presidente serbio, Aleksandar Vucic, ha declarado en repetidas ocasiones que Belgrado continuará con su política de neutralidad militar y «tratará de resistir todo el tiempo que pueda sin imponer sanciones contra la Federación Rusa». El conflicto armado en Ucrania, en su opinión, se está convirtiendo en la Tercera Guerra Mundial, y los países occidentales aumentan la presión sobre Serbia debido a su negativa a apoyar las sanciones contra la Federación Rusa.