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El presidente del Banco Mundial, David Malpass, estableció el jueves una nueva hoja de ruta para la participación del sector privado en el financiamiento de proyectos en las economías emergentes y en desarrollo, ya que las necesidades anuales de financiamiento se disparan a USD 2,4 billones.
Las necesidades anuales masivas de financiamiento, según una nueva estimación del Banco Mundial, podrían abordar los efectos del cambio climático, la guerra y las pandemias, y el capital privado es «esencial» para satisfacer esas necesidades, dijo Malpass.
Malpass anunció su renuncia al Banco Mundial en febrero y el prestamista espera seleccionar a su reemplazo a principios de mayo.
El programa se basa en tres pilares, agregó, el primero de los cuales apunta a ayudar a un mejor flujo de capital al brindar macroestabilidad y transparencia, al mismo tiempo que construye bancos de datos que respaldan la toma de decisiones.
«El producto de estos análisis se centrará en las acciones que los países deben tomar para un clima de inversión sólido, mercados competitivos y un papel equilibrado del Estado en la economía», dijo Malpass en un evento organizado por el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales. en Washington.
Luego, la hoja de ruta pasa a abordar los problemas de liquidez, mientras se enfoca en las oportunidades para que las empresas estatales atraigan capital privado.
Por último, pretende crear un mercado de valores con grado de inversión que atraiga a inversores institucionales.
«Nuestra aspiración con el tiempo… es ver la creación de una clase de activos masivos, dinámicos e invertibles para infraestructura en países en desarrollo que abarque fronteras y sectores para diversificar el riesgo y lograr costos de financiamiento más bajos», dijo Malpass.
«La iniciativa impulsará un desarrollo sostenible que sea inclusivo y respetuoso con el medio ambiente, reduzca el carbono, mejore el acceso a la energía, alivie la pobreza y alcance el ritmo requerido de digitalización global».
