Medellín, Colombia— Dos manifestaciones separadas provocaron el cierre de carreteras en la capital de Colombia, Bogotá, el martes.
La Asociación Distrital de Trabajadores de la Educación (ADE) y los repartidores de Rappi se dieron cita en distintos puntos de la ciudad para protestar contra las políticas educativas y laborales propuestas recientemente.
Protestas de maestros
La primera de las dos protestas estuvo encabezada por los maestros de la ciudad, quienes se congregaron en el Planetario de Bogotá en la Carrera 7 y Calle 26 y luego marcharon hasta la Alcaldía en Calle 11 y Carrera 8.
Su objetivo es mostrar su desaprobación hacia la política educativa que está impulsando la administración de la alcaldesa de Bogotá, Claudia López.
La ADE, afiliada a la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode), organizó la protesta.
Han exigido que el distrito negocie con prontitud un pliego de demandas que resuma su descontento con la gestión de la Secretaría de Educación.
Presidenta de la ADE, Aura Daza, resaltado algunas de las solicitudes clave, que incluyen “el financiamiento de la educación pública, abordando el deterioro de la salud de los maestros, así como el destino de los maestros temporales que se han quedado sin trabajo”.
Rappi protesta
La segunda manifestación fue encabezada por “Rappitenderos”, repartidores de una de las empresas emergentes de entrega más grandes de la región, quienes se reunieron en el Parque Nacional antes de marchar al Congreso.
Su principal demanda es la revisión de los contratos laborales en la última reforma laboral del gobierno nacional. Ellos argumentar que la nueva reforma dejará a más de 140.000 sin trabajo.
A principios de este mes, la ministra de Trabajo Gloria Inés Ramírez aclamado esta reforma es “la reforma laboral más ambiciosa de este siglo”, pero algunos trabajadores de Rappi no están satisfechos.
La reforma requeriría que los Rappitenderos se unan a la empresa a través de un contrato formalizado en un intento de proteger sus derechos.
Sin embargo, los trabajadores subrayan que no quieren que su independencia se vea obstaculizada. Edward Gómez, un manifestante, le dijo a LaFM“No tenemos horario, no tenemos jefe, porque para nosotros eso es beneficioso, podemos estudiar, hay gente que trabaja en la mañana y en la noche con Rappi”.
Álvaro Velasco, líder de los Rappitenderos, dijo Revista Semana, “Estamos pidiendo que se modifique el capítulo 6 de la reforma y se elimine la palabra ‘contratación’, porque no queremos ningún tipo de vinculación laboral con ninguna plataforma”.
Gustavo Petro ha respondido desde entonces, afirmando que los trabajadores de Rappi están siendo engañados.
“Estos trabajadores marchan por orden de la patronal en contra de la reforma que va a dignificar su trabajo”, dijo. tuiteó. “Es lo mismo que en los días en que se debatía la libertad de los esclavos. Los dueños de esclavos les dijeron a sus esclavos que si los liberaban se morirían de hambre”.
De los videos publicados en Twitter, parece que cientos de rappitenderos asistieron a la protesta.
En 2020, hubo protestas generalizadas contra Rappi por sus violaciones de los derechos de los trabajadores, con miles de trabajadores saliendo a defenderse en todo el país.
Alrededor de las 4pm del martes, Tránsito de Bogotá tuiteó que las protestas se habían dispersado.