Un juez polaco con acceso a información clasificada que huyó a Bielorrusia fue despojado el jueves (9 de mayo) de su inmunidad legal, abriendo el camino a posibles cargos de espionaje.
Bielorrusia anunció el lunes la entrada de Tomasz Szmydt en el Estado aliado de Moscú, con quien Polonia mantiene relaciones tensas, sobre todo desde el inicio de la guerra en Ucrania.
Szmydt era cercano al partido de derecha polaco Ley y Justicia (PiS), que perdió poder ante una coalición pro-Unión Europea el año pasado.
Los fiscales iniciaron una investigación sobre posible espionaje esta semana y el primer ministro Donald Tusk dijo que el caso de Szmydt llevaba la marca de «alta traición».
El jueves, un tribunal disciplinario “autorizó a Tomasz Szmydt a ser considerado penalmente responsable”, afirmó en un comunicado Anna Adamiak, portavoz del fiscal general.
«Esta decisión… conducirá a la pérdida de inmunidad del juez en este caso, lo que permitirá que se le presenten cargos», añadió, citando la ley sobre espionaje.
Adamiak dijo que la evidencia «muestra claramente que Tomasz Szmydt participó en una guerra híbrida… llevada a cabo por Bielorrusia y Rusia contra Polonia».
Sus “acciones estaban destinadas a socavar la posición de Polonia en el mundo así como su política exterior y provocar tensiones internas”.
El ministro de Justicia, Adam Bodnar, dijo anteriormente que la pérdida de inmunidad permitiría emitir una orden de arresto y una notificación de Interpol, aunque reconoció que los servicios polacos no podrían detener al juez en Bielorrusia.
Según informes de los medios, Szmydt se ha pronunciado en casos relacionados con certificados de seguridad para información clasificada secreta sobre la OTAN, la UE y la Agencia Espacial Europea.
También ha trabajado en el Ministerio de Justicia y en el Registro Mercantil y de Empresas.
Participó en un programa del presentador ruso Vladimir Soloviov, descrito por el Departamento de Estado estadounidense como “el propagandista pro-Kremlin más enérgico”.
El juez y su ex esposa participaron en una campaña en línea atacando a los jueces que se pronunciaron en contra de las reformas legales introducidas por el PiS cuando estaba en el poder.