PyE
GRUENHEIDE, Alemania: Tesla obtuvo el jueves el visto bueno del ayuntamiento local para ampliar su fábrica alemana en Gruenheide, cerca de Berlín, a pesar de las protestas contra los planes del fabricante estadounidense de vehículos eléctricos.
La luz verde del consejo de Gruenheide es sólo el primero de una serie de obstáculos que Tesla debe superar antes de poder iniciar su expansión para añadir espacios logísticos, incluida una estación de tren. La ampliación también debe ser aprobada por las autoridades ambientales locales.
La expansión es parte de los planes del fabricante estadounidense de vehículos eléctricos de duplicar la capacidad del sitio a 100 gigavatios hora de producción de baterías y 1 millón de automóviles por año, preparándolo para dominar el mercado europeo de vehículos eléctricos.
Los ecologistas y grupos locales temen que la ampliación de la planta ponga en peligro el suministro de agua de la región, ya que se encuentra en una zona de protección del agua potable.
Los manifestantes contra la expansión se enfrentaron con la policía a principios de este mes cuando algunos de ellos intentaron asaltar las instalaciones. Un presunto ataque incendiario cercano dejó la planta sin electricidad en marzo.
Frente a la sala donde los miembros del consejo de Gruenheide se reunieron el jueves bajo protección policial, los manifestantes sostenían carteles que decían «La gente está por encima de las ganancias» o «Cierren el grifo de Tesla».
Tesla ya tuvo que revisar sus planes de expansión después de que los ciudadanos de Gruenheide votaran en contra de ellos en febrero, y ahora se dispone a talar sólo 47 hectáreas de bosque, la mitad de la superficie inicialmente prevista.
