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El gobierno tunecino ha firmado un acuerdo con Estados Unidos para repatriar los restos del personal militar estadounidense que murió mientras combatía en el norte de África durante la Segunda Guerra Mundial.
La decisión allana el camino para el regreso de 2.841 soldados estadounidenses, algunos de ellos sin identificar, que fueron enterrados en el Cementerio Norteafricano Americano en Cartago. Los restos serán desenterrados y enviados a Estados Unidos, con posible identificación y cierre para las familias cuyos seres queridos nunca han sido encontrados.
Otros 3.724 estadounidenses perdidos durante la guerra siguen desaparecidos. Como parte de la ceremonia de firma, el ministro de Relaciones Exteriores de Túnez, Othman Jerandi, depositó una ofrenda floral en la Piedra del Recuerdo para rendir homenaje a los soldados estadounidenses caídos. También visitó el Muro de los Desaparecidos en el cementerio, junto con diplomáticos estadounidenses que estuvieron presentes en la ceremonia y la firma del Día de los Caídos.
Richard Norland, embajador de EE. UU. en Libia, y Daryl Durgan, jefe de la Comisión Arqueológica de Guerra de EE. UU., encabezaron la ceremonia conmemorativa. También estuvieron presentes Natasha Franceschi, jefa de la embajada de EE. UU. en Túnez, y Brian Pearl, jefe de la oficina militar de EE. UU. para prisioneros de guerra (POW) y soldados desaparecidos en combate (MIA), quienes participaron en la firma del MOU.
La conmemoración del Día de los Caídos fue “un conmovedor recordatorio de los inmensos costos pagados para proteger no solo la libertad estadounidense sino también la de nuestros aliados y socios”, dijo Franceschi.
Imagen: Embajada de EE. UU. en Túnez
